Un relé es un interruptor operado por una señal eléctrica. Se compone principalmente de un electroimán, contactos de conmutación y una carcasa que protege los componentes internos. Cuando una corriente pasa a través del electroimán, se genera un campo magnético que mueve una palanca o brazo de contacto, cerrando o abriendo un circuito. Esto permite que el relé controle dispositivos como motores, alarmas, y sistemas de control automático, sin que la señal de control tenga que manejar la carga directamente.

    Vida útil de un Relé

    La vida útil de un relé es un factor crucial para determinar su eficiencia y desempeño a lo largo del tiempo. Los relés no están diseñados para durar indefinidamente, ya que sus componentes, especialmente los contactos, se desgastan con el uso. Este desgaste se debe principalmente a las altas temperaturas generadas durante la conmutación, así como a la acumulación de suciedad o corrosión en los contactos.