Un relé es un interruptor electromagnético que permite abrir o cerrar un circuito eléctrico en respuesta a una señal de control. Su funcionamiento se basa en el principio de que un campo magnético puede atraer o repeler un contacto mecánico, lo que hace posible controlar circuitos de alta potencia con señales de baja potencia. Los relés son ampliamente utilizados debido a su capacidad para manejar cargas más grandes de manera segura y confiable.

    1. Control de Potencia y Automatización

    Una de las aplicaciones más comunes de los relés es el control de circuitos de alta potencia. En sistemas industriales, los relés permiten que un pequeño interruptor de control active o desactive dispositivos grandes, como motores eléctricos, compresores o generadores. En estas aplicaciones, el relé actúa como un intermediario entre un sistema de control de baja potencia y los dispositivos de alta potencia, protegiendo así los sistemas sensibles de sobrecargas o fallos.