La ósmosis inversa (RO) es una de las tecnologías más utilizadas en el tratamiento de agua, tanto en aplicaciones domésticas como industriales. Este proceso se basa en el uso de membranas semipermeables para eliminar impurezas del agua, y uno de los componentes clave en su funcionamiento es la válvula solenoide. Estas válvulas son esenciales para controlar el flujo de agua a través del sistema, asegurando un rendimiento óptimo y eficiente. En este contexto, China se ha consolidado como un líder mundial en la fabricación de válvulas solenoides, ofreciendo una amplia variedad de productos con alta calidad y precios competitivos.