Un relé de interruptor es un dispositivo electromagnético que puede abrir o cerrar contactos de un circuito eléctrico en respuesta a un cambio en alguna magnitud eléctrica, como corriente, voltaje o temperatura. Cuando el relé detecta un cambio que alcanza el valor límite preestablecido, actúa sobre los contactos del interruptor, conectando o desconectando el circuito. Este proceso se lleva a cabo en fracciones de segundo, lo que lo hace ideal para situaciones donde la intervención humana no es posible o es demasiado lenta.

    Los relés de interruptor son fundamentales en numerosos sectores, desde la automatización industrial hasta las aplicaciones residenciales, ya que permiten automatizar tareas que, de otro modo, requerirían la intervención manual. Además, actúan como un sistema de protección frente a sobrecargas, cortocircuitos, o fallas en los equipos eléctricos, protegiendo tanto a las personas como a los dispositivos conectados al sistema eléctrico.